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20 Oct Como el modelo cloud me ayudó a reinventar mi negocio

Posted at 14:36h in Hoteles, Restaurantes, Retail by Vanessa Abad Ramírez

Hoy 20 de octubre, aniversario número decimo de mi restaurante, primer año en la historia que no lo podemos celebrar como se merece.

Años atrás contratábamos una orquesta de música tropical, dábamos deliciosos pasabocas para esta fecha especial nos frecuentaban extranjeros y personas cercanas y terminaba en fiesta al borde del mar, ¡cómo cambian las cosas!

Todo un camino y cada dirección de este con sube y bajas, pero creciendo cada vez más como empresa, porque estamos abiertos a los nuevos cambios del mercado e invertir en tecnología, eso es lo que nos ha permitido manteros en el tiempo.

Por ahí escuche que, si el producto y el servicio de un negocio es malo, el mismo mercado se encarga de sacarlo, por ende, siento que hemos estado haciendo las cosas bien.

10 años que me permito celebrar, pero no fue fácil y menos con la situación económica y de salud que hoy vivimos mundialmente. Saber que hoy es nuestro aniversario me hace recordar los mejores y peores momentos vividos, Imagínense que casi cerramos el año pasado

Mi restaurante ya tiene cierto recorrido y por ahorrar en costos casi perdemos parte del activo más valioso de la empresa, es decir los datos de nuestra información.

Desde que abrimos nos vimos en la necesidad de implementar una herramienta, que nos permitiera hacer todas las actividades con mayor facilidad, yo tan llevada de mi parecer, y, ¡sí qué me costó conseguir un buen aliado que cumpliera con todos los requisitos!

Pasados dos años, después de intentar con nuestras fuerzas y a nuestra manera, se decidió implementar un software y nuestro aliado fue ICG.

Al momento de hacernos la venta y captar nuestra atención como negocio nos presentaron todos los beneficios como realizar reservas, agregar el menú, y retira automáticamente en cantidades de lo utilizado por cada plato para tener siempre el inventario actual.

Al inicio me solía pasar que no tenia claro cómo realizar el pedido de los alimentos, para tener abastecida la carta del restaurante y cumplir con cada plato de esta, pero el software de ICG me permitió organizarme y adicional hacer pedidos desde el computador y subirlos de manera rápida al inventario facilitando las actividades operacionales y dejándome menos carga laboral.

Cuando decidí la modalidad de la licencia la modalidad vitalicia, es decir de un único pago me pareció más rentable, sin embargo, no comprendía la importancia de estar actualizando e invirtiendo en nuevas tecnologías para mi negocio, de manera constante.

Sin embargo, no tuve en cuenta que el modelo cliente servidor tenía unos costos asociados que mi negocio no tenía cómo cubrirlos, y en temas de mantenimiento y energía para el servidor los costos se habían incrementado

También ahorré un poco, descuidando la operación, no pagando las actualizaciones y contratando por horas al mes a un encargado de mantenimiento del servidor. Sin embargo todo estos “ahorros” se me convirtieron en un infierno cuando recibí un mensaje inesperado:

Un día muy caluroso, por cierto, llegué a mi oficina a las carreras con mil cosas por hacer y al abrir mi computador para hacer un pedido para el bar, no me dejaba entrar a mi usuario, se me bloqueaba la pantalla.

Sin más espera llamé a ICG quienes me comunicaron con la encargada de soporte e intentamos ingresar, cuando ¡oh sorpresa!, me sale una ventana negra diciéndome que tenían raptada mi información y que debía pagarles un valor muy alto para ser liberada.

Si señores y señoritas, sufrí un secuestro masivo de información, algo que nunca había escuchado de mis cercanos o colegas hablar, pero me pasó. Y mi pregunta era ¿ahora qué?

Pagar o no pagar, pues la asesora de ICG me recomendó no pagarles a los secuestradores por la información, porque se han escuchado casos donde no devuelven la información. Así que 10 años de información totalmente perdida, información muy valiosa e importante a la basura, mis clientes, sus datos, información contable, las recetas, las reservas pendientes entre otras cosas.

Este error fue por mi parte, por no proteger mi información y me hizo llegar a pensar si sería necesario cerrar mi proyecto de vida, sin embargo, afronté la situación y tomé la decisión de continuar y fue un comenzar desde cero.

La verdad es que ICG fue un aliado fundamental para que hoy podamos celebrar los 10 años de aniversario, ya que su acompañamiento y su colaboración para volver a surgir fue total.

Como ICG ya había satisfecho completamente las necesidades de mi negocio, decidí reinventar la forma como tenía administrada la información de mi restaurante. Conocí la opción de ICG Cloud en la cual le entregamos la administración de la infraestructura tecnológica a ellos, quienes son expertos y cuentan con procesos más sofisticados en cuanto a seguridad, actualización y mantenimiento de la misma.

A ojo cerrado la recomiendo, pero sigo sin entender por qué tuve que esperar a que me sucediera algo para cambiarme y es que las principales ventajas que he encontrado en tener este modelo:

Tener a la mano los datos de la empresa desde cualquier lugar a través de internet y al mismo tiempo ir a la vanguardia de la tecnología.
Ahorrar gastos operativos y administrativos.
Mantenimiento base de datos hecho por expertos.
Personal técnico responsable de sistema operativo.
No es necesario respaldos adicionales por si se daña.
Manejo de datos relevantes y la contabilidad de la empresa con copia de seguridad
Alojar la información en la nube retira los costos de luz para mantener los equipos en funcionamiento 24/7, adicional del ahorro en refrigeración de los mismos.

Lo mejor de ICG Cloud es que el manejo de la información queda responsabilidad de la empresa ICG , ya que ellos me garantizan el respaldo de mis datos el mantenimiento en el servidor, por ende, ellos son responsables 100% de que a través de su tecnología nunca me vuelva a pasar un secuestro de información.